martes, 26 de julio de 2011

Mi vida...

Mi mente quiere que escriba, pero en lo único que pienso es en frases de amor... desgraciadamente o afortunadamente (realmente no lo sé) soy muy sentimental.

Mi cabeza da vueltas y vueltas, piensa tantas cosas sobre el presente, el pasado y sobre todo en el futuro. Pensarán que tengo miedo del futuro pero realmente no es eso lo que me tiene tan aferrada en pensar en el futuro. Tengo muchas ganas de saber que es lo que pasará conmigo, con este corazón frágil, con este cuerpo fuerte, con esta cabeza llena de ideas... simplemente quiero seguir viviendo tan apasionadamente como lo he hecho siempre.

No me gusta tener una vida sin aventuras, me gusta vivir con esa adrenalina en mis venas. El sentir mariposas en la panza, sentir esos retortijones que te dan al tener nervios por algún momento que tienes miedo que no te salga como quieres, sentir ese enojo porque las cosas no salieron como las planeaba, sentir tristeza y poder sacar todo aquello que le hace daño a mi alma, sobre todo sentir esa alegría inmensa que llena mi corazón cuando estoy con mis seres queridos.

Me fascina vivir siendo una novela, una novela que puede ser escrita y sería un completo éxito. Lastima que nadie quiere escribir sobre ella (solo se lo pregunte a una persona pero me dijo que ella no servia para hacer novelas).

Visitar mil y un veces la playa para sentir la brisa en mi cara y que despeine mi pelo risado en el viento. Me muero por ver esa puesta de sol que cautiva completamente mi mirada. Mis pies mojados por el agua salada de ese mar tan inmenso y sin fin. Ir caminando a la orilla de la playa para saborear lo rico que es vivir y sentir la arena suave por todo tu cuerpo.

Tengo tantos sueños que cumplir, pero tan poca vida por vivir. Necesito explotar mi tiempo y poder realizar cada segundo de mi vida esas aventuras que tengo guardadas desde hace tiempo.

No quiero regresar el tiempo, no me arrepiento de absolutamente nada en esta vida. Simplemente mi vida es perfecta tal y como está y se que seguirá siendo perfecta mientras pasan los años.

Todas aquellas personas que se han atravesado en mi camino me han acompañado a caminar en mi vida y a aprender a levantarme cuando algo me tira. Algunas se han alejado de mi, tal vez esperando el momento preciso para volver a mi lado, pero hay otras que siguen estando conmigo, también hay mucha gente que camina junto a mi sin que yo me de cuenta. Pero también llegan personas nuevas y que hacen de mi vida algo mucho más especial de lo que es.

Me encanta mi vida dramática, porque se que así tendré algo que contarles a mis hijos o tal vez a mis nietos.

Mi vida empieza como novela y termina como poesía.